La obsesión de Sherri Telnas por ahogar a sus hijos viene de lejos. Ya en 2008, cuando el mayor era aún un bebé, lo había intentado ahogar en el río Montana. Tras declararse culpable, Telnas estuvo bajo la custodia de los funcionarios de salud mental hasta que, en 2016, su psiquiatra dijo que “no tenía ninguna preocupación sobre su capacidad para ser madre”.
Sin embargo, los fantasmas del pasado volvieron hace una semana cuando la mamá sumergió a sus dos hijos en el canal de un campo de maíz de Porterville, California. Jackson Telnas, de 12 años, murió en el lugar del ahogamiento, donde las autoridades detuvieron a la mujer. Jacob Telnas, de siete años, perdió la vida este domingo en el hospital Visalia, según KTLA.
Hace diez años, cuando la mujer intentó ahogar a Jackson, dijo que “los malos pensamientos o las voces” le dijeron que lo hiciera. Aunque fue declarada culpable de dos delitos graves, quedó bajo la custodia psiquiátrica por su historial de enfermedades mentales. Ahora, justificó el asesinato de sus hijos alegando que “estaban poseídos por demonios”, según dijo el Visalia Times Delta.
Tras el intento de Sherri de ahogar al bebé Jackson, la pareja se separó y el pequeño vivió con su papá Jacob. En 2012, Jacob y Sherri reanudaron su relación y poco después nació el hijo pequeño en California.
En el caso actual, Sherri se enfrenta también a otros cargos por agredir a un oficial de paz y arrojar fluidos o heces sobre alguien. Por todos ellos, si es declarada culpable, Sherri podrá incluso enfrentar la pena de muerte.
Por La Opinión
