La Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) denunció este miércoles que miembros de las Fuerzas Vivas del Fútbol irrumpieron en las instalaciones para realizar una conferencia de prensa que no estaba autorizada.
En un comunicado, la federación indicó que la solicitud de hacer la conferencia de prensa por parte de esta organización no fue autorizada debido a que “no se cuenta con la autoridad competente por encontrarse incapacitada por salud”.
Sin embargo, la institución señaló que varios miembros de las Fuerzas Vivas del Fútbol ingresaron al auditorio “Héctor Palomo Sol” para realizar su conferencia.
“Personal contratado para llevar a cabo la conferencia de prensa por las autodenominadas Fuerzas Vivas, violentaron la puerta principal del auditorio paa ingresar equipo de sonido, pantalla, etc. Aun conociendo que no contaban con la autorización, generando daños materiales de esta federación; adicionalmente, manifestaron a empleados de la FESFUT, que al no haber autoridades superiores, ellos podían ingresara cuando quisieran”, denunció la federación a través de un comunicado de prensa.
Asimismo, la organización señaló que este hecho puede considerarse como un hecho delictivo por daños a la propiedad privada y recalcaron que seguirán las órdenes de la comisión que elija la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA).
En este momento, la federación del balompié nacional se encuentra acéfala debido a que se espera que FIFA, a través de CONCACAF, seleccione a la comisión regularizadora.
El conflicto inició a mediados de julio cuando la Fiscalía General de la República (FGR) ingresó a las instalaciones de la federación por una investigación de administración fraudulenta en contra de los exdirectivos.
Posteriormente, el Instituto Nacional de los Deportes (INDES) designó a una comisión que no fue reconocida por FIFA, ya que lo consideró como una injerencia del gobierno en asuntos del deporte.
Finalmente, FIFA indicó que ellos escogerían a los nuevos directivos. Sin embargo, no se ha obtenido mayor información sobre ese proceso. Mientras tanto, las tres divisiones del fútbol local han suspendido sus actividades y se ha perdido más de $2.5 millones de dólares.
